lunes, 18 de febrero de 2013

Los nuevos estadios de Chaca y de Morón


Los nuevos estadios de Chaca y de Morón
Quedé impresionado al ver el nuevo estadio de Chacarita; es realmente de primera. Todavía le falta una tribuna, e incluso en el supuesto caso de que nunca la concreten, igualmente quedará un digno recinto para el futbol, ese deporte que alguna vez practicó el club y que lo llevó al campeonato allá por el 69’.
Me alegro por Chaca, quizás porque es un equipo con tantos fracasos que hasta el de Racing se ríe. Sin embargo, al nuevo estadio se le dio un toque novedoso en su forma. La tribuna visitante es ostensiblemente más pequeña que la local, principalmente a lo ancho. La idea no es cumplir con el cupo visitante escaso (que es de cero en Primera B), sino mas bien separar a la parcialidad local de sus víctimas. Y lo digo sabiendo que el plan original, que se supone aún vigente, apunta a terminar el proyecto con unos espectaculares palcos en sus esquinas, muy al estilo del Libertadores de América. Creo sinceramente que nunca harán tamaña cosa.
 Lamentablemente, hoy las nuevas normas de seguridad han impactado en el diseño final de los estadios. En otras palabras, se ha hecho algo estructural. Eso que eufemísticamente se ha dado en llamar “pulmón”, que se refiere a esa parte del estadio que queda vacía para separar las hinchadas, y que es  algo que no pueden ignorar los dirigentes de un club al momento de armar un estadio.
Y si de seguridad se trata, no se puede obviar que este nuevo canchón se emplaza en el mismo sitio que el viejo, y que por lo mismo, los accesos son de una dificultad que mete miedo, casi tanto miedo como ese paredón de fusilamientos que flanquea por un lado la cancha del Docke. Los capos del funebrero decidieron mantener la tradición y los visitantes continuarán ingresando por French y no por Gutiérrez, que es más ancha y más linda.
Con Morón es otro tema. Su nuevo estadio está emplazado junto al cementerio del municipio, lo cual hace que el gallo se parezca extrañamente a Chaca. Pero las similitudes terminan ahí. Este estadio tendrá codos en la tribuna visitante y por lo tanto estará cerca de la parcialidad local. Una de dos: o los dirigentes de Morón son unos demenciales idealistas que suponen un fin a la prohibición de público visitante en esa tercera categoría o—lo que es más probable—especulan con un ascenso del gallo en los próximos años, lo cual los obligaría a fabricar un hermoso pulmón en ese novísimo estadio. Pero lo mejor del nuevo recinto son sus accesos; amplios, espaciosos, ideales para salir caminando o corriendo, según el hábito que tenga la parcialidad visitante.
Cuando yo comencé a ir a la cancha se hablaba de “las tribunas visitantes”, en plural, porque siempre había un sector de plateas para los exquisitos. No todo tiempo pasado fue mejor. No todo. Pero al menos en este sentido ...
                                                                              Febrero 2013